Hay factores de riesgo que aumentan las posibilidades de que suba el colesterol. Cuidarse es básico para que no ocurra.
La arterioesclerosis o el colesterol elevado es una enfermedad compleja, que no produce síntomas de forma directa y no tiene un único origen. Por ello, es fundamental que se reconozcan los y se corrijan el mayor número posible de éstos.
El primer paso para reducir el colesterol elevado consiste en modificar hábitos de la persona:
Cambiar la dieta en el caso de que el peso sea normal, y en caso de sobrepeso, establecer además medidas para reducirlo.
Mantener un nivel de actividad física mínima de 30 minutos al día
Dejar de fumar en caso de ser fumador
¿Qué es la hipercolesterolemia y cómo tratarla?
El exceso de colesterol en nuestra sangre, también llamado hipercolesterolemia, es uno de los principales factores que puede originar la formación de enfermedades cardiovasculares. En la actualidad, los problemas cardiovasculares, como los que afectan directamente al corazón, se han convertido en una de las principales causas de muerte en España. Debemos ser conscientes de los riesgos que corremos si descuidamos nuestros niveles de colesterol.
Para reducir el nivel de colesterol y evitar sufrir enfermedades cardiovasculares, debemos tener en cuenta los siguientes factores y cambiar nuestros hábitos de vida para reducir al máximo la probabilidad de tener una enfermedad cardiovascular.
Tabaquismo
Los hombres y mujeres de mediana edad que fuman tienen un riesgo mucho mayor de sufrir un infarto de miocardio. Al dejar de fumar, este riesgo disminuye de forma progresiva.
Dieta
La alimentación es otro factor importante en relación a nuestro nivel de colesterol. Se recomienda mantener una dieta mediterránea rica en cereales, legumbres, frutas, verduras, pescado azul rico en grasas omega3 y aceite de oliva. Por otro lado, limitando el consumo de lácteos grasos, carnes rojas y embutidos, con alto contenido en grasas perjudiciales.
Alcohol.
Su consumo muy moderado aumenta el colesterol HDL y puede reducir el efecto negativo del colesterol LDL. Sin embargo, puede producir a la vez un aumento de la tensión arterial y puede dañar órganos como el hígado.
Ejercicio
Practicar ejercicio de forma regular, aunque no sea de manera intensa, ha demostrado que reduce el nivel de colesterol y en consecuencia, el riesgo de sufrir una enfermedad coronaria.
Peso corporal excesivo
La obesidad y el sobrepeso, especialmente la grasa en el abdomen, favorecen la aparición de enfermedades cardiovasculares. Es beneficiosa la pérdida, aunque sea ligera, de ese exceso de peso.
El colesterol hay que mantenerlo bajo control al ser un factor de riesgo en la aparición de enfermedades del corazón. Te enseñamos cómo tener una vida saludable con un colesterol bajo:
¿Qué es el colesterol?
Las funciones del colesterol son básicas para el ser humano. Hay diferencias entre el colesterol LDL y el colesterol HDL.
El colesterol es una sustancia grasa presente en todas las células del organismo que es necesaria para la propia vida, porque cumple importantes funciones en el organismo. Entre ellas, es de destacar que forma parte de la membrana celular; interviene en la formación de los ácidos biliares (necesarios para la digestión de las grasas); sirve para la formación de algunas hormonas, entre ellas las sexuales; y en la piel se transforma en vitamina D, por acción de los rayos solares. Hay que diferencia entre el colesterol bueno y el colesterol malo.
Las principales grasas en la sangre son el colesterol, los triglicéridos, los ácidos grasos libres y los fosfolípidos. Se han detectado diversas lipoproteínas unidas al colesterol, de entre las cuales, las de baja densidad LDL (low density lipoprotein) y las de alta densidad HDL (high density lipoprotein) son las más reconocidas.
Las partículas LDL desempeñan una función fundamental y necesaria en la formación de la arteriosclerosis. Su aumento en sangre se considera perjudicial y constituye un objetivo para los tratamientos encaminados a reducir el riesgo cardiovascular. Por el contrario, las HDL tienen un efecto inverso a las anteriores y su aumento en sangre se considera protector respecto al riesgo cardiovascular.
El perfil de lípidos básico incluye la determinación de los niveles de colesterol total, colesterol-LDL, colesterol-HDL y triglicéridos.
¿Cómo se mide el colesterol malo?
Para analizar el nivel de colesterol se realiza en ayunas mediante un análisis de sangre, o mediante dispositivos presentes en muchas farmacias, para poder así calcular los niveles totales de colesterol, LDL y HDL.
La importancia de un colesterol elevado es muy diferente según la existencia de otros factores de riesgo de arteriosclerosis, como tabaquismo, diabetes y presión arterial elevada (hipertensión), o una historia familiar con casos de enfermedad cardiovascular.
En términos de colesterol total, los niveles indicados son:
Si la concentración de colesterol es menor de 200 mg/dl, se considera muy saludable.
Si la concentración de colesterol se sitúa entre 200 mg/dl y 239 mg/dl, se considera poco saludable.
Si la concentración de colesterol es mayor o igual a 240 mg/dl, se considera de alto riesgo.
En términos de colesterol LDL, los niveles indicados son:
Si la concentración de colesterol LDL es inferior a 100 mg/dl, se considera muy saludable.
Si la concentración de colesterol LDL se sitúa entre 100 y 129 mg/dl, se considera saludable.
Si la concentración de colesterol LDL se sitúa entre 130 y 159 mg/dl, se considera poco saludable.
Si la concentración de colesterol LDL se sitúa entre 160 y 189 mg/dl, se nada saludable.
Si la concentración de colesterol LDL es igual o superior a 190 mg/dl, se considera de riesgo elevado.
En términos de colesterol HDL, los niveles indicados son:
Entre los hombres, las concentraciones de colesterol HDL que oscilan entre 40 y 50 mg/dl, se consideran muy saludables.
Entre las mujeres, las concentraciones de colesterol HDL que oscilan entre 50 y 60 mg/dl, se consideran saludables.
Si la concentración de colesterol HDL es inferior a 40 mg/dl, se considera nada saludable y representa un factor de riesgo para la enfermedad cardiovascular.